martes, 19 de diciembre de 2017

Paloma Uceda La Boquerona

Después de aprobar sus estudios de EGB, sus padres la ofrecieron en recompensa un regalo. Paloma pidió una moto. El problemilla era que su hermano también quería una por lo que, al final, tuvieron que compartir durante algún tiempo una Gilera de 50. Luego, Paloma consiguió una primera moto “de verdad”, concretamente una XS400 (aquella mítica Yamahita de faro rectangular, modelo que se dejó ver en parrillas de fórmulas y copas nacionales) antes de adquirir una bella Yamaha XJ600 con la que no paró de rutear, consiguiendo además el subcampeonato del Trofeo Super Rutero de nuestra revista Solo Moto correspondiente al año 86. En febrero del año siguiente recibió el premio rodeado de ilustres personajes como  Luis “El Mudo”, Codina, Carlos Cardús, Felipe Belinchón, Juantxu Arrue (DEP), Alfredo Fernández, etc, en resumen, una banda de amigos y moteros casi ya legendaria y, sin duda, entrañable para los que nacimos hace “un rato”.
Baldomero Torres, el famoso speaker de Jerez, la llamaba "la Boquerona Uceda" o "Penelope Glamour".
La cosa no quedó allí, los viajes la llevaron hasta los circuitos. Por aquellos días ya estaba en marcha la nueva y fantástica pista de Jerez. Paloma fue testigo privilegiado: la vio construir, asfaltar y fue de las primeras moteras que pudo rodar en el, a modo de inauguración, antes de celebrarse el primer Gran Premio, junto a sus amigas del moto club de chicas que habían fundado. Con los años Jerez se convirtió en su pista favorita.

El veneno de las carreras, ese viejo conocido, atrapó a nuestra protagonista y se apuntó para probar en el Criterium de 125 con una Gilera de la época. Solo corrió un año con esa moto. La experiencia fue positiva pero la moto rompía mucho y ella empezó a desear pilotar motos más grandes. Mientras, en su vida “civil”, consiguió un auténtico pepino, la bestial Suzuki GSXR1100, a la que la hizo el rodaje viajando hasta Madrid desde su tierra bajo una bonita lluvia y ante el sano argumento de “tomar un café en la capital”… Posteriormente, dejó las motos pequeñas y comenzó a correr con motos de 4T (casi siempre acompañada con su número 5) participando en el Cto. de España y en el Andaluz de Superbike y Supersport desde 1988 a 1992.
Consiguió entre otros resultados, el tercer puesto en el Campeonato Andaluz de 1987, ser la octava clasificada en las 8 Horas de Resistencia del Campeonato de España del 88 (con una CBR que pusieron a su disposición con el equipo Lanzar-Burger Aquarium) y otra vez octava en la clasificación final de la Copa Nacional Yamaha FZR 600 de 1992.

(reseñar que su hermano Javier también fue un buen piloto consiguiendo el subcampeonato Andaluz)
Paloma recuerda con una sonrisa aquella bonita temporada y aquel competitivo campeonato, organizado por el concesionario oficial malagueño ECOmoto. Marcas como Moriwaki, Pirelli o Ngk, fueron los principales patrocinadores y todos los participantes usaban los mismos componentes básicos. Al finalizar aquel año de grandes eventos nacionales y olímpicos, los recursos y las ayudas comenzaron a esfumarse y, como tantos otros pilotos, tuvo que colgar el mono. Llegó la retirada, casi otra vida, una boda, unos hijos, usar la moto solo para “pasear”, etc, esa otra cara de la existencia… pero lo mejor de esta historia es que todavía no ha acabado.
No fue un punto y final sino un punto y seguido. La pasión y las ganas todavía están ahi, latiendo. Solo podemos decirle con una sonrisa: hasta pronto, piloto.








miércoles, 6 de diciembre de 2017

Lady Florence Norman estilo Belle Epoque 1905


Lady Florence Norman, sufragista Londinense.

Desde 1905 hasta comienzos de la Primera Guerra Mundial, estos años se caracterizan por ser el apéndice de la moda recargada propia de la Belle Epoque, así como por la aparición de una silueta que tiende hacia la verticalidad en la mujer (se ponen de moda los corsés rectos y largos y las faldas con poco vuelo y acompañadas de una sobrefalda) y al orientalismo. Las faldas de día se acortan hasta los tobillos, dejando a la vista los zapatos.

Lady Florence Norman, una sufragista, iba a trabajar en las oficinas de Londres (donde era supervisora) en su scooter. El scooter fue un regalo de cumpleaños de su esposo, el periodista y político liberal Sir Henry Norman.